Texto: Igone Mariezkurrena (CB Nanga Parbat)
17/01/2016
A las 8:00 de la mañana recibíamos en el CB la primera llamada de los dos escaladores: “La noche ha sido heladora, –30ºC, pero estamos listos para arrancar”. En efecto, a través de los prismáticos podíamos ver cómo abandonaban el C2 y avanzaban a lo largo de la primera arista de nieve.
A las 16:00 de la tarde han vuelto a contactar para comunicar que estaban de regreso en el C2: “Hemos metido 500 metros de cuerda en total, nos habremos quedado a unos 200 metros del C3 (6.700m)”. La jornada ha transcurrido mayormente sobre terreno mixto y al sol (a diferencia de días anteriores). Su plan para mañana es desmontar la tienda del C2 dejándolo todo bien depositado y emprender el descenso hacia el CB equipando, de paso, el Muro Kinshofer “en condiciones” –de víspera lo escalaron empleando cuerdas fijas del año pasado–. Las previsiones meteorológicas auguran aún varias jornadas más de buen tiempo, pero les va a ser imposible seguir avanzando en la ruta por falta de cuerda: “A pesar de que ayer tanto Ali como yo subimos cada uno con más de 20 kilos a la espalda, sólo entre los dos no hemos podido portear hasta aquí arriba –C2– toda la cuerda necesaria para llegar a equipar hasta el C3”, explicaba Txikon.
Querían haber emprendido algo más temprano la jornada de hoy, pero el de ayer –martes, día 16– fue un día francamente largo: Hasta pasadas las 22:00 de la noche no confirmaron a CB que ya habían montado la tienda y que se disponían a derretir nieve.
Por su parte, los polacos Bielecki y Czech emplearon el día de ayer para bajar todas sus pertenencias desde su C1 y depósitos superiores al CB. Según ha manifestado el propio Adam Bielecki hoy mismo, la expedición ha terminado para ellos; en breve emprenderán el regreso a casa. Citan como principales razones el fracaso de su intento alpino y el mal tiempo.
Txikon y Sadpara descansarán a partir de mañana en el CB antes de iniciar la siguiente rotación